El pánico se ha adueñado del mercado de las criptodivisas
El pánico en el mercado es tal que como ejemplo, la ‘stablecoin’ Terra, ha pasado a sufrir una inestabilidad sin precedentes y, en estos momentos, su precio cae hasta los 0,22 dólares, con un desplome del 96,6% respecto al día anterior. Ha perdido su puesto en el ‘top ten’ por capitalización y su valor de mercado es de unos 732 millones de dólares tras perder la paridad con el dólar, lo que hace que caiga al número 60 por capitalización.
Terra al desvincular su paridad con el dólar, ha acentuado aun más su desplome. Su creador ha salido al paso anunciado que «reconstruirá» el producto modificando su mecanismo y captando más capital. Desde la ruptura de su paridad esta semana con la divisa estadounidense, la moneda ha ido cayendo, desde que marcó máximos históricos en el inicio del mes, cotizando en 117,95 dólares.
Terra era una de las ‘stablecoin’ de mayor tamaño en el mercado tras Tether y USD Coin. Estas últimas, sí ejercen de criptodivisa diseñada para proteger a los inversores ante la volatilidad en los mercados, ya que en las últimas 24 horas la primera cotiza sobre los 0,9495 dólares (-5%) y la segunda en los 1,01 dólares (+0,66%).
Solamente USD Coin junto a Binance USD resisten en positivo dentro del ‘top 15’. Solana, otra de las más conocidas, se deja un 37% en un día; Cardano retrocede un 31% y Dogecoin cae casi un 30%. El desplome es generalizado no solo entre las grandes, sino también en el resto, ya que la tónica general es de descensos de dos dígitos.
La capitalización de todas ellas ha descendido un 17,5% en las últimas 24 horas y su valor conjunto en el mercado es de 1,16 billones de dólares, el equivalente solo al bitcoin a finales de noviembre. El bitcoin por su parte se desploma un 12% y ya cotiza en los 26.850 dólares, por lo que ha perdido la barrera psicológica de los 27.000 dólares y marca mínimos desde diciembre de 2020.
Los inversores en criptos han entrado en modo pánico, sobre todo ahora que también en la renta variable se imponen las correcciones. El principal motivo de este desplome tiene que ver con la inflación, como detonante en la reducción del crecimiento económico y ante una posible recesión en la economía. Desde los propios bancos centrales, ya han tomado cartas en el asunto y han optado por endurecer su política monetaria, con subidas de tipos tanto por parte de la Fed como del Banco de Inglaterra. El BCE, por su parte ya se plantea una subida del precio del dinero para julio, según reconoce su presidenta Christine Lagarde.